Anidado en el pintoresco entorno del pequeño puerto de Sal Rei, Boavista, Cabo Verde, el restaurante Te Manche es una joya escondida que ofrece una experiencia culinaria única. Es conocido como uno de los mejores restaurantes de mariscos de la zona, con una selección de platos que están meticulosamente preparados y servidos con atención al detalle.
Te Manche es un punto de referencia local, apreciado por su idílica ubicación en el muelle. Desde aquí, los clientes pueden disfrutar de una vista inigualable de la bahía y el Morro de Areia, un panorama que encanta y relaja, haciendo que cada comida sea una ocasión especial.
Entre los platos más apreciados, destaca el estofado de atún por su sabor absolutamente delicioso. Pero no es solo el atún lo que domina el menú: una variedad de platos de pescado fresco, incluyendo garopa, morena frita y pez wahoo (conocido localmente como serra), ofrecen un auténtico sabor de la abundancia marina de Cabo Verde. Estas delicadezas, expertamente preparadas por el chef, rinden homenaje a la rica herencia gastronómica de la isla.
No solo la comida, sino también las bebidas en Te Manche merecen mención. El restaurante ofrece una amplia selección de bebidas, incluyendo vino blanco local, que destaca por su ligera efervescencia natural que lo hace particularmente refrescante.
Te Manche también es el lugar perfecto para un momento de relajación, quizás para una bebida rápida durante un día de exploración en Sal Rei. El personal, que habla con confianza inglés, francés, alemán y portugués, brinda una cálida bienvenida y un servicio atento.
Además, cenar en Te Manche ofrece la oportunidad de sumergirse en la vida local. Es común ver a pescadores descargando su captura y a niños locales jugando alegremente en el agua, una vista que agrega un toque de autenticidad y vitalidad a la experiencia.
Por lo tanto, el restaurante Te Manche representa una auténtica experiencia de Cabo Verde, una ocasión para saborear deliciosos platos, disfrutar de vistas impresionantes y sumergirse en la atmósfera local. Una visita aquí es más que una simple comida: es un sabor de la verdadera vida en Boavista.
